¡Dioses solares!
¡Espíritus fluviales de la sangre!
Por la vida misma
(...)
por mi misma muerte que sobre mi corazon
ha de tener un hueco sin respuesta.
¡Gracias!
Por mi fracasada sombra
por mis estíos y mis otoños
mis labios mis turbulencias
mis éxtasis mi solitaria frente sin orillas
(...)
Por mi destino tendido en la tiniebla
la angustia de mi tiempo y la mentira
de las estrellas sobre mi cabeza
girando en sumida impotencia.
Por cada latido de mi entraña hacia la luz
por cada humilde paso de mi ser
desarrollándose en germinal crecimiento
desde su sombrío caos incomprensible
hasta la ruta solar de la eternidad.
(...)
por todo aquello que no puedo decir
pues se me quiebra en los labios
de esta época miserable
preñada de grandiosos terrible augurios.
(...)
Tristeza sin donde, 2016. Lápiz conté, óleo, hojas secas, yute y papel sobre madera. 4 dibujos de 200 x 200 cm
2 maderas con tela y hojas de 202 x 147 cm /195 x 152 cm